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*mientras escuchaba las palabras de Leonardo, Iris noto la presencia de aquella chica que había visto en el restaurante pero no le dio mucha importancia puesto a que el haberse encontrado a Leonardo de nuevo le había traído una sensación de alivio. Iris recibe el libro, lo paga y asiente con una sonrisa a la pregunta de Leo*

-Gracias… hasta luego.

*Con una pequeña sonrisa de gusto, Iris se dirige al parque a leer su libro; de hecho iba con la esperanza de poder ver más tarde a Leo, esta vez siendo más cuidadosa para que nadie conocido pudiera verlos*

-Ahora que lo pienso, esa chica estaba ahí otra vez, y estaba mirándome de una forma extraña; seguro trabaja con él, que suerte tiene.

*Perdiendo la noción del tiempo se quedo dormida bajo aquel gran árbol donde vio por primera vez a Leonardo, donde vio por primera vez a Andrés; Iris comenzó a tener un sueño, una imagen borrosa, una voz le hablaba, era un recuerdo perdido en su memoria…*

-Andrés: Iris, ven conmigo por favor.
-Iris: Andrés yo quiero pero…
-Andrés: vamos yo te cuidare siempre, te amo Iris…

*El sueño termina y al despertar Iris se da cuenta que ya se está haciendo tarde y con un poco de tristeza decide irse*

-ese sueño, ese recuerdo, Andrés, lo siento… será mejor que me vaya ya es tarde y no quiero tener problemas, a la final Leo no vino.

*y mientras salía del parque oye su nombre “Iris espera!” al darse vuelta, ve a Leonardo que venía corriendo atrás de ella.*

-Leonardo! No pensé que vendrías, lo siento, estaba a punto de irme, se está haciendo tarde.

“desearía poder estar más tiempo con él, pero no es conveniente. No es justo, desearía que el tiempo se detuviera”

Leonardo: quédate, unos minutos más, ya no pude llegar antes el trabajo me apresó, ansiaba tanto verte, no sabes cuantas veces he esperado verte, pero no venias, creo que la fortuna me ha sonreído hoy aunque a medias pero si lo ha hecho.

Iris: yo también quería verte, hablar contigo; encontrarte me trajo un poco de alegría hoy. Pero se está haciendo tarde y no debo regresar tarde, además en este lugar, no es conveniente estar por aquí…

Leonardo: * toma la mano derecha de Iris * existe un porqué? me gustaría saberlo, quiero conocerte más Iris, no sabes lo difícil que resulta no verte, te he hablado una vez, pero ansió quedarme más tiempo contigo, me es una eternidad cuando no te veo, no me niegues este momento, déjame quedarme a tu lado un momento más por favor!

Iris: es que…

*de pronto Iris ve que la criada está caminando a lo lejos y piensa “yo quiero hablar con él, debo hablar con él!”*

Iris: está bien, vamos al laberinto, ahí podremos hablar…

Leonardo: quizás con poquito de prisa la lleva- Iris, tienes la mirada más bella que haya visto pero a la par es tan misteriosa como si algo oscuro guardara, pero tu esencia es angelical, y algo aqueja tu alma, a veces pareces serena y otras distantes, se que tal vez diga un disparate pero es la verdad

Iris: *se sonroja levemente y baja la mirada* -Leo, yo solo soy una chica común. Quiero saber más sobre ti, sobre lo que haces. Tu dejaste esa nota en la banca hace tiempo? *Iris llevaba tiempo preguntándose si Leonardo había dejado esa nota, y si era para ella*

Leonardo: una sonrisa le ilumina el rostro- la nota que estaba en la banca no tenia tu nombre pero esa nota era para ti. Solía mirarte desde el árbol que no esta tan distante y tras las ramas disfrutaba tu presencia no sé porque pero hacías que el jardín se viera más hermoso. No sé en qué momento mi corazón quedo prendado por ti, pero me provocaba tanta ansiedad no verte, quería disfrutar tu sonrisa. Mi trabajo es de registrador de caja de la librería, es un pasito para alcanzar mi sueño * le sonríe aun más que antes *

Iris: *su corazón se acelera al escuchar la verdad; él era su admirador pero no todo estaba claro, pues ante tal declaración no podría ser correspondida. “que debería responder?”* -Tus palabras son muy lindas, pero yo no podría, no tengo permitido… lo siento Leonardo, yo no merezco esos sentimientos *responde ella con la mirada triste*.

Leonardo: *sin decirle palabra alguna se acerca a ella y la abraza con mucha fuerza *- sabía que no es nada fácil desde el comienzo, que no podría ver siempre a la chica de los bellos ojos, y no sé el motivo que te separa de mi pero hare lo imposible por que el trecho se acorte, Iris, me permitirás hacerlo?

Iris: *se estremece por el abrazo, lo mira a los ojos y una lagrima brota* no sé por qué, pero me siento muy conectada a ti, desde la primera vez que te vi, fue como si volviera a vivir el pasado. Cuando estoy contigo me siento feliz, pero al mismo tiempo me da miedo, tengo miedo de lo que pueda pasar, no quiero lastimarte a ti también, Leonardo yo no debo hacer esto…

Leonardo: tan mala puede ser mi presencia para ti? *dice tímidamente mientras la acurruca en su cuerpo, este momento era especial y quizás vital si quería saber el por qué de la tristeza de sus ojos * Iris, quiero estar contigo y hare todo lo necesario para eso, si quieres hablo con tu familia para pedirles que me dejen verte aunque sea un momento, que me dejen hablarte, puedo ganarme su aprecio por ti porque lo vales todo, quiero poder formar parte de tu vida, lo deseo lo ansío.

Iris: no! no Leo es que mi familia… Mis padres, no sé por qué, nunca me han permitido estar con alguien. Yo también quiero estar contigo, quiero ser feliz, pero si te pasa algo a ti, no me lo perdonaría * escuchando los latidos de su corazón, Iris sentía que los sentimientos de él eran puros y sinceros, se aferra a Leonardo cálidamente, como si de una despedida se tratase* Leonardo yo soy la heredera de Montreal, mi familia, tal vez has escuchado sobre ellos…

Leonardo: *con una mirada de asombro al escuchar el apellido le recordaba algo, a un hombre que vestía de negro y se parecía elegante y al chofer que lo llamaba de una forma muy formal* tus padres son gente de adinerada, pero si les demuestro que puedo ser alguien, que tengo toda la capacidad para luchar por ti, ellos verán tu bienestar por seguro *la mirada de alguien estaba al acecho, de una forma bastante curiosa, era una señorita casi tan alta como Leo que caminaba por el parque, y por azar o capricho le llamo la atención la mirada de Leo, con una alegría embriagante se dispuso a retirarse, " no sabía que este parque tenia hombres así " se refería a Leo, pero también nota algo extraño no se algo que le era muy atrayente pero a la par no lo era *

Iris: Y tu familia? Ellos saben algo? Mi familia no es muy fácil de llevar Leo, será muy difícil. Podría pasarte algo y no quiero que pase de nuevo, no contigo *su mirada se torna muy preocupada, pues ya era muy tarde y en cualquier momento la criada podría aparecer* tal vez puedas convencerlos, pero no creo que debas hacerlo ahora, es muy pronto y además estamos en pleno negocio. *una voz se escucha cada vez más cerca. “Iris! Estas por aquí? Iris!!!” era la criada buscándola* -Es la criada, no puede vernos, debo irme, por favor no dejes que te vea *lo abraza para despedirse, lo mira a sus ojos tímidamente y le entrega una pequeña nota*

Leonardo: * le sonríe * espera Iris, no creo que sea tan difícil tu familia y tranquila se cuidarme bien, por mi no te preocupes, tu familia parece algo extraña *le dice al escuchar que están en pleno negocio* no importa para mi eres valiosa tú, hare todo en mis manos para eso espera Iris *no le dice alto porque sabe que la criada esta cerca y seria meterla en líos innecesarios.. Solo toma la notita y la guarda como el más fiel de sus tesoros, luego regresa a la banca donde suele sentarse Iris y un suspiro se le escapa * no se cuanto la amo, pero mi corazón se dispara cuando la veo, hasta donde llegara este sentimiento, será que convenzo a su familia, ahora más que nunca quiero conocerlos, pero a que se refería Iris diciendo que era peligroso? * se queda un tanto pensativo, y la chica que antes los vio se acerca a preguntarle su nombre, ella tenía una seria intriga mas cuando notó sus ojos, que eran similares a los de su padre, y tenía algunos rasgos de su hermano, pero para descartar dudas, preguntar y salir del tema, pero con alguna excusa para no levantar sospechas *
…: que noche tan bonita, hace tiempo que no veía lo bien que se ve el parque en la noche con este juego de luces, lo siento, he sido inoportuna? Últimamente no hay muchas personas rondando a estas horas y me pareció que tal vez podría hacerle compañía *dice ella con picardía sentándose junto a Leonardo* mi nombre es Ariel y espero que no sea muy atrevido de mi parte, pero me gustaría saber su nombre.

Leonardo: * un tanto distraído tras ver la nota que atesoraba en sus manos y decía " si, nos veremos pronto ", emocionado hasta que la chica llegó y si le parecía algo inoportuna pero decirle eso sería una falta de respeto según su consideración* ah yo, estaba caminando en este lugar suelo hacerlo *la señorita le daba algo de curiosidad por un motivo por lo que le dijo Iris, " si alguien me vio con Iris… no quiero que ella se gane ningún problema por mi causa " se dice a sí mismo, e intenta ocultar información* mi nombre es *se queda dudando un momento bien corto y en vez de decir su nombre dice el de su padre* Santiago, Santiago es mi nombre *lo hace a modo de precaución *

Ariel: *ella se queda pensando por un momento “que curioso, se llama igual a mi hermano mayor y tiene rasgos parecidos, bueno solo es una coincidencia, este chico se ve al menos 2 años mayor que yo, y es muy apuesto…”* Es un placer Santiago, es un nombre muy elegante. Entonces sueles estar por este parque, yo no es que este muy a menudo por aquí, pero algo me impulso a caminar por aquí hoy. No es muy común ver a personas caminando a estas horas por el parque, debe ser por esos rumores de que hace algunos años ocurrió una tragedia… bueno eso no tiene importancia solo son rumores.

Leonardo: entiendo ah no sabía lo de aquel incidente... no he vivido mucho tiempo aquí.. Bueno si antes pero ahora llevo menos de un año desde que retorne a esta ciudad.. No recuerdo mucho porque mi vida se cerró en la rutina, por el trabajo y otras responsabilidades... si es así como dices deberías tener muchísimo cuidado de caminar sola por aquí.

Ariel: entonces fue una suerte conocerte, ya no estoy tan sola *le dice tímidamente mientras se levanta* Bueno Santiago, fue un placer, espero nos podamos volver a ver, hasta luego…